martes, 27 de marzo de 2007

Se le pasó la micro

Me parece pésimo lo que ha hecho la Presidenta Bachelet al destituir al ministro Espejo. Es desconcertante ver que no se respetan los procesos y se termina de raíz con un trabajo serio que, aunque con errores groseros, debia mejorarse desde dentro, y no trayendo a un "zar" (como se ha denominado a Cortázar) completamente ajeno al proceso.
Aunque el Transantiago sea un fracaso que le quita dignidad a todos los chilenos que viajan en condiciones miserables, Sergio Espejo siempre puso la cara y se responsabilizó de la mejor forma: trabajando duramente para solucionar los problemas.

Saludos,

Fermín

lunes, 26 de marzo de 2007

Vendrán tiempos mejores para ella

Siento pena por Michelle Bachelet. Lo digo en serio, sin entenderlo como menoscabo.

El cargo de Presidente de la República es un puesto al que se llega por tener una profunda vocación política y de servicio público, y que generalmente (es el caso de la mayoría) es preparado y planificado por muchos años antes de lograrlo.

El caso de Michelle Bachelet fue completamente opuesto. Podríamos decir, y no faltaríamos a la verdad, que ella fue "colocada" en el cargo. ¿Cuál fue el mecanismo para este posicionamiento?: Las encuestas.

Las encuestas que comenzaron a proliferar allá por el año 2003 contenían una simple pregunta: ¿Quién de los personajes de la Concertación siente usted más cercano?
Las respuestas apuntaron a una mujer que en ese entonces era ministra de defensa, y que no era mayormente conocida en el ámbito político salvo por haber sido ministra de salud.

Claramente, a nosotros no nos importó su historial politico - por cierto casi nulo salvo por su participación en la clandestinidad apoyando al partido socialista en tiempos de la Junta Militar.
Tanto era el desconocimiento que muy poca gente sabe que Bachelet fue candidata a alcaldesa por Las Condes en 1996, obteniendo sólo un 2,35% de los votos.

El nivel de posicionamiento la llevó a ser la primera Presidenta mujer en la historia de Chile, logrando un 53, 5% de los votos el 15 de enero de 2006.

¿Tiene Michelle Bachelet la capacidad para ser la Presidenta de la República?

La vocación política y el liderazgo son dos capacidades que no mucha gente tiene. De hecho, escasean.
Esto de ninguna manera es algo malo. Sostener algo así sería como decir que es malo que yo no tenga gran aptitud para las matemáticas o el trabajo en grupo.

Michelle Bachelet ha demostrado no tener capacidad para dirigir un país. Lo digo, repito, sin ningún menoscabo hacia ella.

Sin embargo, aunque no tenga la culpa de no tener esta aptitud, sí es responsable por todos los errores que se han cometido durante su gobierno.

Dentro de ellos nos encontramos, por nombrar algunos, con el paro de los escolares, la construcciones de viviendas básicas indignas (12 m2), la corrupción de Chiledeportes, la distribución de la píldora del día después, el plan de transportes Transantiago, el mal manejo de las decisiones internacionales (Consejo de seguridad de la ONU, que tiene capitulo aparte con los dichos de Claudio Huepe), designaciones políticas deficientes (Loreto Dietzel, Martín Zilic), normas de paridad que perjudican a las mujeres, entre otras.

Michelle Bachelet es una persona inteligentísima, con mucha capacidad en su área (la salud). Ha demostrado, además, tener cierto liderazgo frente a la fauna de hienas que intentan alcanzar cierta figuración.
Es una mujer empática, cercana y por cierto trabajadora.

Pero no tiene la capacidad para manejar un país. Simplemente no la tiene.

Esperemos, por ella, que los años que le quedan sean tiempos de paz, con una oposición constructiva y con una coalición gobernante que sepa interpretar las necesidades reales de la gente.

miércoles, 21 de marzo de 2007

Un compromiso de todos

En mi primer "artículo" (no se como llamarlo, opciones no faltan) quiero agradecer a todas las personas que me han ayudado y me han incentivado a tener una vocación por el servicio público.
Puede sonar extraña tanta determinación proviniendo de una persona de 20 años, pero la verdad es que creo que hoy lo tengo más claro que nunca.

En una sociedad profundamente afectada por la carencia valórica, es imperioso hacer sentir nuestra opinión, la opinión de las personas que queremos a este país por habernos dado la vida.

En realidad, nuestra Patria nos ha entregado mucho. Le debemos a ella mucho más que el himno nacional, le debemos agradecimiento por acogernos y por ser la tierra de nuestros padres.

Como decía, hoy más que nunca es necesario mostrar nuestros sentimientos, nuestros deseos y esperanzas, hacer sentir nuestro descontento, alegrarnos por las victorias. En fin, sentirnos vivos.

Creo que sería irresponsable de nuestra parte no hacernos cargo de la situación actual de nuestra sociedad. Día a día nos vemos enfrentados a temas que nos atañen directamente, y frente a los cuales algo tenemos que decir.

Esa es mi promesa: Decir lo que haya que decir sin pelos en la lengua, defender nuestros valores de manera intransable, demostrar que frente a las decisiones de autoridad la moral cristiana sí tiene algo que decir.

Ésa es también el compromiso que espero de ustedes: hacer de este blog una instancia de reunión y sano debate, en el que podamos apreciar con mayor perspectiva la realidad de la sociedad en que nos toca vivir.

Muchos saludos,

Fermín